El protagonista de esta novela, la primera de Miguel Delibes, galardonada con el premio Nadal 1947, es ?como en tantas de sus obras? un niño. Pedro, huérfano desde la infancia, va a parar a Ávila para su educación, al hogar sombrío de don Mateo Lesmes, que le inculcará la creencia de que para ser feliz hay que evitar toda relación con el mundo, toda emoción o afecto. Sólo la vitalidad de la juventud podrá hacerle superar este pesimismo inculcado. Sin embargo, los acontecimientos parecen obligarle a recordar lo aprendido... Con el estilo impecable que lo caracteriza, Delibes traza una obra inolvidable en que la muerte, que rodea constantemente al protagonista, es vencida al fin por la esperanza.

La sombra del ciprés es alargada

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Autor: Miguel Delibes|| Editorial: Austral
Formato: Tapa blanda || Nº páginas: 352

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Sinopsis: El protagonista de esta novela, la primera de Miguel Delibes, galardonada con el premio Nadal 1947, es como en tantas de sus obras un niño. Pedro, huérfano desde la infancia, va a parar a Ávila para su educación, al hogar sombrío de don Mateo Lesmes, que le inculcará la creencia de que para ser feliz hay que evitar toda relación con el mundo, toda emoción o afecto. Sólo la vitalidad de la juventud podrá hacerle superar este pesimismo inculcado. Sin embargo, los acontecimientos parecen obligarle a recordar lo aprendido... Con el estilo impecable que lo caracteriza, Delibes traza una obra inolvidable en que la muerte, que rodea constantemente al protagonista, es vencida al fin por la esperanza.

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Mi opinión

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La sombra del ciprés es alargada es el primer libro que escribió Miguel Delibes y el primero también que me ha dejado con una sensación de total indiferencia. No sé si es culpa del propio libro, o si será que los Premio Nadal no son lo mío (Nada de Carmen Laforet no me gustó mucho y El mapa de los afectos de Ana Merino tampoco).

Estructuralmente, la obra se divide en dos partes: la primera nos cuenta la infancia que nuestro protagonista, Pedro, pasó en Ávila. En la segunda parte, nos encontramos a un Pedro ya adulto y en ella iremos viendo cómo los sucesos de su infancia marcan su vida adulta, y de qué manera éstos afectan a sus relaciones personales.

En general el libro me ha parecido tedioso y monótono. Y no es que no ocurran cosas, porque en ese sentido siempre estamos yendo hacia delante, pero la forma de narrarlas es tan plana a lo largo de todo el libro que simplemente perdía el interés.


Sorprendentemente para tratarse de Miguel Delibes, el lenguaje utilizado en este libro no me ha gustado nada. Estamos antes un libro muy intimista donde los pensamiento de Pedro tienen un papel principal. Sin embargo, durante todo el libro me ha parecido que el lenguaje era demasiado forzado y rocambolesco sin motivo. Sobre todo durante la primera parte, donde tanta intensidad injustificada me parecía impropia de un niño.

La trama en sí tampoco ha sido gran cosa. Como en muchos libros del autor, la trama no tiene un peso importante pero en este caso el resto de los componentes no ha acompañado, así que la historia se ha quedado coja, con unos personajes que no han terminado de importarme nunca (ni para bien ni para mal) y con una trama en la que nunca llegué a involucrarme del todo.


Para mí, el problema principal de este libro es que antes de la mitad ya me había cansado de estar en la mente del protagonista. A pesar de estar narrado todo en tercera persona, estamos siempre viendo el mundo a través de los ojos de Pedro, y que sus pensamientos fueran igual de profundos e intensos de niño que de adulto fue algo que me sacó bastante de mis casillas y a lo que nunca llegué a acostumbrarme: no conseguía congeniar lo que estaba leyendo con los pensamientos de un niño.

Desde luego creo que no es el mejor libro de Miguel Delibes y mucho menos creo que nadie deba empezar por él a leer al autor, porque no es representativo del resto de sus novelas. Yo por ahora no guardo como mi primera decepción real con el autor, y, para aquél que quiera empezar con el autor, siempre recomendaré leer El camino.

Nota: puntos extra negativos a esta edición de Austral. Pocas veces he leído un libro tan mal editado como éste: muchas erratas y fallos de maquetación, como saltos de línea donde no debía, falta de ellos donde debería haber y guiones de diálogo desaparecidos. Muy mal.

Valoración

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