Digamos, para comenzar, que Marley estaba muerto. De eso no hay duda. El acta de su entierro fue firmada por el párroco, por el escribano, por el empresario de pompas fúnebres y por el que presidió el duelo. Sí, Scrooge la firmó: y el nombre de Scrooge tenía validez en la Bolsa para cualquier asunto en que él decidiera firmar. El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta
Canción de Navidad
Autor: Charles Dickens
Año: 1843
Idioma original: inglés
Año: 1843
Idioma original: inglés
¡Hola!
Os doy la bienvenida a una nueva sección del blog que me hace muchísima ilusión y que espero que os guste: Comparando Traducciones. En esta nueva sección buscaré diferentes ediciones con diferentes traducciones de libros en otros idiomas y las compararé (desde un punto de vista puramente personal) y valoraré qué me gusta más o menos de cada una de ellas. Personalmente suelo fijarme bastante en la traducción de un libro cuando lo compro, y he pensado que a otras personas también podría resultarle interesante.
Disclaimer: La idea de esta sección no es criticar ni a las traducciones ni a los traductores, y menos yo, que no tengo formación en el tema. La idea es más bien poner en valor la importancia de una buena traducción, y cómo diferentes personas podemos traducir lo mismo de muchísimas formas diferentes y bueno, que para gusto los colores.
Comenzamos la sección con un clásico entre los clásicos en Navidad: Canción de Navidad, de Charles Dickens. Un breve vistazo a mis librerías locales me dio una imagen de qué ediciones se están vendiendo más estos años, y de ellas he sacado las primeras frases para comparar las diferentes traducciones. El texto original en inglés es el siguiente:
Disclaimer: La idea de esta sección no es criticar ni a las traducciones ni a los traductores, y menos yo, que no tengo formación en el tema. La idea es más bien poner en valor la importancia de una buena traducción, y cómo diferentes personas podemos traducir lo mismo de muchísimas formas diferentes y bueno, que para gusto los colores.
Comenzamos la sección con un clásico entre los clásicos en Navidad: Canción de Navidad, de Charles Dickens. Un breve vistazo a mis librerías locales me dio una imagen de qué ediciones se están vendiendo más estos años, y de ellas he sacado las primeras frases para comparar las diferentes traducciones. El texto original en inglés es el siguiente:
MARLEY was dead, to begin with. There is no doubt whatever about that. The register of his burial was signed by the clergyman, the clerk, the undertaker, and the chief mourner. Scrooge signed it. And Scrooge's name was good upon 'Change, for anything he chose to put his hand to. Old Marley was as dead as a door-nail.
Mind! I don't mean to say that I know, of my own knowledge, what there is particularly dead about a door-nail. I might have been inclined, myself, to regard a coffin-nail as the deadest piece of ironmongery in the trade.
Editorial: Alianza(2011)
Traducción: Santiago R. Santerbrás
Digamos, para comenzar, que Marley estaba muerto. De eso no hay duda. El acta de su entierro fue firmada por el párroco, por el escribano, por el empresario de pompas fúnebres y por el que presidió el duelo. Sí, Scrooge la firmó: y el nombre de Scrooge tenía validez en la Bolsa para cualquier asunto en que él decidiera firmar. El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta
¡Cuidado! No quiero dar a entender que yo sepa por mí mismo que el clavo de una puesta sea algo especialmente muerto. Por lo que a mí respecta, me inclinaría a considerar el clavo de un ataúd como la pieza más muerta de todo el comercio de ferretería.
Traducción: Santiago R. Santerbrás
Digamos, para comenzar, que Marley estaba muerto. De eso no hay duda. El acta de su entierro fue firmada por el párroco, por el escribano, por el empresario de pompas fúnebres y por el que presidió el duelo. Sí, Scrooge la firmó: y el nombre de Scrooge tenía validez en la Bolsa para cualquier asunto en que él decidiera firmar. El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta
¡Cuidado! No quiero dar a entender que yo sepa por mí mismo que el clavo de una puesta sea algo especialmente muerto. Por lo que a mí respecta, me inclinaría a considerar el clavo de un ataúd como la pieza más muerta de todo el comercio de ferretería.
Editorial: Random House Mondadori(2012)
Traducción: Nuria Salinas Villar
Para empezar, Marley estaba muerto. De eso no cabía la menor duda. En el acta de defunción figuraban las rúbricas del clérigo, el secretario, el director de la funeraria y la persona que presidía el duelo. También la de Scrooge. Y su nombre bastaba para validar en el Mercado de Valores todo cuanto deseara emprender. El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta
Pero ¡cuidado! con esto no pretendo decir que sepa por experiencia propia qué hay de especialmente muerto en el clavo de una puerta. Podría haber optado por considerar un clavo de un ataúd como el artículo más muerto de una ferretería.
Traducción: Nuria Salinas Villar
Para empezar, Marley estaba muerto. De eso no cabía la menor duda. En el acta de defunción figuraban las rúbricas del clérigo, el secretario, el director de la funeraria y la persona que presidía el duelo. También la de Scrooge. Y su nombre bastaba para validar en el Mercado de Valores todo cuanto deseara emprender. El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta
Pero ¡cuidado! con esto no pretendo decir que sepa por experiencia propia qué hay de especialmente muerto en el clavo de una puerta. Podría haber optado por considerar un clavo de un ataúd como el artículo más muerto de una ferretería.
Editorial: Austral(2018)
Traducción: José C. Vales
Marley estaba muerto; eso para empezar. En ese punto no cabe la menor duda. El registro de su entierro fue firmado por el pastor, el secretario, el director de la funeraria y por el principal allegado: Scrooge. Scrooge lo firmó; y el nombre de Scrooge confería validez a todo aquello en lo que decidiera estampar su firma. El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta.
¡Ojo! No estoy diciendo que yo sepa, por mi cuenta, qué tiene de muerto concretamente el clavo de una puerta. Por lo que a mí respecta, podría haberme sentido inclinado a considerar que el clavo de un ataúd es el objeto más muerto de todo el comercio ferretero
Traducción: José C. Vales
Marley estaba muerto; eso para empezar. En ese punto no cabe la menor duda. El registro de su entierro fue firmado por el pastor, el secretario, el director de la funeraria y por el principal allegado: Scrooge. Scrooge lo firmó; y el nombre de Scrooge confería validez a todo aquello en lo que decidiera estampar su firma. El viejo Marley estaba tan muerto como el clavo de una puerta.
¡Ojo! No estoy diciendo que yo sepa, por mi cuenta, qué tiene de muerto concretamente el clavo de una puerta. Por lo que a mí respecta, podría haberme sentido inclinado a considerar que el clavo de un ataúd es el objeto más muerto de todo el comercio ferretero
Editorial: Alianza(2001)
Traducción: Miguel Ángel Pérez Pérez
Para empezar, Marley estaba muerto; de eso no cabe la menor duda. El certificado de su entierro lo habían firmado el clérigo, el oficial de la sacristía, el director de pompas fúnebres y quien presidía el duelo. Scrooge lo firmó, y el nombre de Scrooge contaba mucho en el Royal Exchange para todo lo que él quisiera. El bueno de Marley estaba más muerto que el clavo de una puerta.
¡Ojo! Con esto no pretendo decir que yo sepa qué tiene de muerto el clavo de una puerta. Personalmente, habría considerado que el clavo de un ataúd es la pieza de ferretería más muerta que existe.
Traducción: Miguel Ángel Pérez Pérez
Para empezar, Marley estaba muerto; de eso no cabe la menor duda. El certificado de su entierro lo habían firmado el clérigo, el oficial de la sacristía, el director de pompas fúnebres y quien presidía el duelo. Scrooge lo firmó, y el nombre de Scrooge contaba mucho en el Royal Exchange para todo lo que él quisiera. El bueno de Marley estaba más muerto que el clavo de una puerta.
¡Ojo! Con esto no pretendo decir que yo sepa qué tiene de muerto el clavo de una puerta. Personalmente, habría considerado que el clavo de un ataúd es la pieza de ferretería más muerta que existe.
Editorial: Aguilar(1970)
Traducción: José Méndez Herrera
Dígase para empezar que Marley había muerto. De eso no cabe duda ya. Firmada fue el acta de su entierro por el sacerdote, el sacristán, el empresario de pompas fúnebres y el presidente del duelo. También Scrooge la firmó. Y el nombre de Scrooge lo aceptaba la Bolsa como bueno en todo aquello que quisiera poner su mano. Muerto estaba el pobre Marley como el clavo de una puerta.
Pero ¡cuidado! No quiere esto decir que yo sepa, por experiencia, qué es lo que tiene de muerto el clavo de una puerta. Acaso pensara yo que un clavo de ataúd es la pieza de ferretería más muerta que existe en este gremio.
Traducción: José Méndez Herrera
Dígase para empezar que Marley había muerto. De eso no cabe duda ya. Firmada fue el acta de su entierro por el sacerdote, el sacristán, el empresario de pompas fúnebres y el presidente del duelo. También Scrooge la firmó. Y el nombre de Scrooge lo aceptaba la Bolsa como bueno en todo aquello que quisiera poner su mano. Muerto estaba el pobre Marley como el clavo de una puerta.
Pero ¡cuidado! No quiere esto decir que yo sepa, por experiencia, qué es lo que tiene de muerto el clavo de una puerta. Acaso pensara yo que un clavo de ataúd es la pieza de ferretería más muerta que existe en este gremio.
¿Qué traducción os ha gustado más? Personalmente no lo tengo nada claro. Las dos que menos me gustan con diferencia son las de José Méndez de Aguilar y la de José C. Vales de Austral. La primera me parece que tiene un ritmo demasiado artificial (que no tiene la versión original) y la segunda veo detalles tanto en el primer como en el segundo párrafo que no me convencen en cuanto a traducción y sonoridad.
De las tres traducciones que tengo en el podio, creo que el primer puesto se la disputan las traducciones de Nuria Salinas y Santiago R. Santerbrás: en ambas me parece que se hace una traducción lo más fiel posible al original no solamente en el significado, sino también en la intención del autor y la sonoridad del lenguaje.
¿Cuál ha sido vuestra versión favorita del inicio de Canción de Navidad? ¿Tenéis alguna de estas traducciones u otra que no esté aquí?
De las tres traducciones que tengo en el podio, creo que el primer puesto se la disputan las traducciones de Nuria Salinas y Santiago R. Santerbrás: en ambas me parece que se hace una traducción lo más fiel posible al original no solamente en el significado, sino también en la intención del autor y la sonoridad del lenguaje.
¿Cuál ha sido vuestra versión favorita del inicio de Canción de Navidad? ¿Tenéis alguna de estas traducciones u otra que no esté aquí?